Hablamos de la reproducción en masa y el aura de la misma de la obra, que tiene que ver directamente con su originalidad.
En algunas ocasiones la reproducción es limitada o tiene un número determinado de copias.
En otras ocasiones se pierde la autoría del autor.
En ocasiones buscamos el ángulo de la representación icónica.
Existe el mito de la primera vez, el feticismo de la obra, si no nos interesara la calidad de la obra, pensaríamos en el VHS como una ruina, el tiempo a marcado la obra.
A mediados del siglo XX se pierde el anclaje a la imposición, el valor cultural tiene que ver con el valor cultural, es decir le damos culto a la obra por el valor cultural que tiene.
El valor cultural es lo que crea comunidad.
El arte y la cultura son diferentes. El arte tiene que ver con el saber, es algo que se crea que necesita a la persona para crearla.
La cultura es una comunidad, es la comunidad quien decide su valor.
Con la Gioconda se acumularon datos con los años, hay un antes y un después en la obra.
Prima el valor compartido de la obra, sobre la obra.
No importa cuantas veces reproduzcamos el ícono o el soporte en que se reproduzca, seguiremos viendo el ícono.
En la reproducción según Benjamin perdemos contacto con el original, pero a la vez ganamos el valor de poder re usarlo.
La reproductividad determina el momento, ya esta impuesto no se puede cambiar.
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